miércoles, 21 de marzo de 2007

Don Balón: El Barça tiene un precontrato con Cristiano Ronaldo




El Barça tiene firmado un pre-contrato con el joven extremo portugués. El jugador de moda en Europa iría al Barça con el dinero que se obtenga de la posible venta de Ronaldinho, tasado en 100 millones de euros.

El Barcelona ya ha iniciado la 'operación renove' de sus estrellas, forzado por las circunstancias y las opiniones del entorno, que hablan del fin de un ciclo y que piden un rejuvenecimiento de la plantilla.

Cristiano Ronaldo (05-02-85) será la gran novedad para la próxima campaña, pero su llegada (tasada en 75 millones de euros) está condicionada a la venta de la gran figura del actual equipo ‘culé’.

Ronaldinho es prescindible.

Joan Laporta está harto de las constantes peticiones de mejora de contrato que está recibiendo por parte del entorno de Ronaldinho (especialmente de su hermano y representante, Roberto de Assis), al que aún le restan tres años de contrato (termina el 30 de junio de 2010).

A ello se suman los acontecimientos de las últimas semanas, que no hicieron más que confirmar lo que era un secreto a voces: el choque de egos en el vestuario 'culé'. Como denunció Samuel Eto'o, el '10' del Barça tiene más privilegios que nadie en la plantilla, lo que desagrada a buena parte de sus compañeros.

Incompatibles en el futuro, Laporta no esconde sus preferencias por Eto'o, al que fichó personalmente del Mallorca, y está dispuesto a prescindir de Ronaldinho (al que trajo Sandro Rosell). El presidente siempre ha defendido al camerunés a capa y espada; incluso intentó quitarle hierro cuando no quiso saltar al césped del Camp Nou ante el Racing para disputar los últimos minutos de partido, desautorizando de este modo a su entrenador Frank Rijkaard.

Pese a la tregua firmada entre todas las partes hasta final de temporada, Txiki Beguristain, Frank Rijkaard y Joan Laporta saben que no pueden tener a dos gallos de diferente ‘denominación de origen’ como Eto'o y Ronaldinho en el mismo gallinero. De este modo, una venta sería la solución ideal: estaría vista con buenos ojos por la dirección deportiva del club.

100 millones asumibles para el Milan.

Por todo ello, Laporta se mostraría encantado de vender a Ronaldinho si recibe una buena oferta por él. Fuentes próximas al presidente aseguran a esta revista que 100 millones de euros es el precio con el que han tasado al crack brasileño, una cifra al alcance de pocos clubs, pero a la que el Milan podría llegar dado su altísimo poder adquisitivo.

Adriano Galliani, administrador delegado de la entidad lombarda, nunca ha escondido el deseo de tener al de Porto Alegre en sus filas. Además, ahora cuenta con algo más a su favor: la autorización de su 'capo' Berlusconi para tirar la casa por la ventana e intentar su fichaje a toda costa. Ya lo dice Berlusconi: "Sólo hay un jugador capaz de levantar a todo el estadio: Ronaldinho". La pasada semana, Roberto de Assis se reunió precisamente con Galliani en Milán con el objetivo de acercar posturas.

Pacto con Cristiano Ronaldo.

Si las arcas azulgranas se llenan con los euros de Ronaldinho, se habrá completado la primera fase de la ‘operación renove’. El siguiente paso se llama Cristiano Ronaldo, que como el brasileño también tiene contrato con su actual club hasta 2010. El Barcelona le ha tomado la delantera al R. Madrid en la carrera por contratar a la estrella portuguesa. Y es que el presidente del club catalán, "ya tiene un pacto con C. Ronaldo para jugar en el Barça la próxima temporada", asegura a DB una persona muy próxima a Laporta. El joven futbolista percibe actualmente unos cuatro millones de euros en los red devils, cantidad que el Barcelona estaría dispuesto a doblar.
Aunque Ferran Soriano, vicepresidente económico del club, asegura que "el Barça puede fichar a cualquiera", difícilmente la entidad podría asumir un traspaso que alcanzaría los 75 millones de euros si no recibe una fuerte inyección económica. Lo curioso es que el club inglés, hace sólo unos meses, lo habría vendido por mucho menos (unos 45 millones), pero su cotización en el mercado se ha disparado.

El Manchester, como es lógico, no se ha quedado con los brazos cruzados. Le ha ofrecido una ampliación de contrato hasta 2012 y una ficha anual de 9 millones de euros. Lo que está claro es que, pase lo que pase, el bolsillo del deportista será el más beneficiado. De momento, el ‘7’ del M. U. no quiere pronunciarse de forma oficial sobre su futuro, pero son otros lo que hablan de sus claras intenciones.

El joven capitán de la selección portuguesa ya ha comentado a sus allegados que abandonará Inglaterra a final de temporada. Su amigo y compañero en la selección, Hugo Viana, lo desveló en la prensa británica (The Sun). "Es difícil que le puedan retener, dentro de poco estará en otro club más importante; él quiere venirse a jugar a España", declaró el centrocampista del Valencia, lo que descarta al Inter de Milán, que también había entrado en la puja. Lo cierto es que el extremo podría cambiar de opinión, aunque el pacto con el Barça es, a día de hoy, una realidad.

Sin duda, por calidad y proyección estamos ante el futbolista más deseado del momento. Pero, ¿por qué gusta tanto este joven atacante luso?

Una temporada inmaculada.

Muchas son las virtudes de C. Ronaldo, que está confirmando su talento con una campaña extraordinaria. De hecho, para los expertos, está siendo el mejor jugador del campeonato inglés y del Viejo Continente. Su nivel de juego ha sobrepasado con creces el que ofreció en su primera gran temporada en la Premier League. El portugués, humilde, lo argumenta en parte gracias a sus compañeros en la punta del ataque de los Red Devils. “Aunque ya no esté Van Nistelrooy, no me siento la estrella del equipo.

En ataque está Louis Saha y Wayne Rooney, que están haciendo un trabajo impecable y son grandes jugadores. Ven puerta con facilidad, participan del juego del equipo, cambian de posición conmigo, y eso me gusta, porque prefiero jugar con compañeros móviles”, detalla Cristiano en una entrevista mantenida con nuestros compañeros de A Bola. A eso se le añaden las segundas juventudes del galés Ryan Giggs y del centrocampista Paul Scholes, por lo que la Liga inglesa ha dejado de ser un paseo militar para el Chelsea de Roman Abramovich y se han convertido en la obsesión del extremo portugués, ya que este es el único título que no ha ganado en Inglaterra. Ronaldo reconoce sin pudor que hasta el momento han sido el mejor equipo, el que mejor ha jugado y el que ha hecho más goles, “por lo tanto se trata de mantener el nivel hasta el final de temporada y proclamarnos campeones”.

Quizás el hecho de priorizar la Premier League pueda pasar factura al M.U. en la Liga de Campeones, pero el internacional portugués se apresura a negar tal posibilidad. “El United tiente equipo suficiente para ganar la Liga de Campeones, ¿o acaso no la ganó el Liverpool recientemente? Disponemos de buenos futbolistas y jugamos muy bien, por lo que podemos aspirar al título”, sostiene un Ronaldo que por el momento ya puede presumir de haber entrado en la historia del M. U. al anotar en octubre de 2005 el gol 1.000 del club en la Premier League. Será para siempre un icono en Old Trafford, al igual que uno de sus jugadores más idolatrados: “Detrás de mí, el mejor ‘7’ que jamás vi jugar fue Cantona”, sostiene.

Verano turbulento.

El viento le sopla a favor en Manchester, pero hace sólo algunos meses la situación no era precisamente agradable para Cristiano Ronaldo, que proclamó su deseo de abandonar Old Trafford. La Copa del Mundo fue agitada. Portugal e Inglaterra volvieron a dirimir sus rencillas en cuartos de final, como en la Euro de 2004, y desde los 11 metros (con acierto en el lanzamiento definitivo de la perla de Madeira incluido), la suerte volvió a sonreír a los hombres de Scolari.

Más allá del choque, lo que coleó durante meses fue el lance en el que Wayne Rooney fue expulsado tras agredir al central del Chelsea Ricardo Carvalho. El fuego cruzado entre C. Ronaldo y los tabloides ingleses, que le acusaban de haber inducido al árbitro del encuentro, Horacio Elizondo, para que expulsara a Rooney, hizo mella en el ex del Sporting, tanto que su regreso a Old Trafford fue puesto en duda. “Me sentí muy infeliz durante un tiempo en Inglaterra. Estaba triste por cómo se hablaba de mi nombre. Ferguson y Jorge Mendes, mi agente, me hicieron ver que marcharme no era la mejor idea y con el tiempo, acabé concluyendo que no estaría en ningún sitio como estaba en Manchester”.

Desde España ya llegaban cantos de sirena, pero Sir Alex Ferguson supo calmar la situación y el ‘7’ del United sigue llevando a la espalda el nombre de Cristiano Ronaldo. “Aunque la última decisión siempre es mía, estuve siempre muy bien aconsejado por las personas que trabajan conmigo. La experiencia me hizo crecer a nivel psicológico. Además, ahora las cosas van mejor. En los estadios rivales, no me silban tanto como a principio de temporada”. El incidente quedó zanjado y hoy los Red Devils desean retener durante muchos años a uno de los mejores talentos del fútbol mundial (otra cosa diferente es si van a poder). De momento, en el ‘Teatro de los Sueños’ sigue sonando con fuerza una canción que reza que “There's only one Ronaldo” (sólo hay un Ronaldo, en referencia a sus conocidos homónimos del Milan AC y el Barcelona).

Jogo bonito... y útil.

Cristiano Ronaldo goza hoy en día del status de estrella, pero hasta hace bien poco, su estilo glamouroso y barroco no acababa de convencer a todos. Él defiende una visión del fútbol romántica. Hedonismo puro. Pero asume que si su juego no fuera más allá de ahí, su estilo vistoso no tendría ningún sentido. Así que a ese punto exhibicionista ha aprendido a mezclarle grandes dosis de competitividad. Y tiene argumentos para discutirlo con cualquiera.
Michel Platini declaraba hace poco que no era fácil jugar en un equipo al lado del luso. “A mí me gustaría tener dos iguales, como yo, uno en la derecha y otro en la izquierda. Así, si uno no juega bien se puede contar con el otro. Respeto todas las opiniones, pero a lo largo de mi corta carrera no he parado de evolucionar. Cada vez me siento más maduro y seguro. Aunque también hay cosas que mejorar. Sólo tengo 22 años y estoy en proceso de aprendizaje”.

La raíz de la discusión se centra en eso por lo que es tan alabado como criticado: el regate. “Cuando era pequeño y jugaba con los más grandes me divertía con mis regates. Crecí así, es mi manera de jugar. Lo llevo en la sangre y las personas van a verme al campo por eso”, comenta para los que le acusan de individualista. Bicicletas, fintas, cambios de ritmo... El muestrario es amplio.

“Preparo mis regates durante la semana, pero en el partido todo es instinto. Depende del lugar y de lo que quiera hacer, intento siempre decidir lo más adecuado. Me gusta dar espectáculo”, prosigue C. Ronaldo en su defensa del uno contra uno. Y aún hay más: “Observo a mis rivales e intento aprovechar sus deficiencias. Si es zurdo o diestro, para qué lado se desplaza mejor, si espera o entra de golpe...”.

El chico más buscado.

“Los futbolistas pueden salir por la noche. Son personas y es normal que se quieran divertir. Lo que no es lógico que los periodistas hagan una tormenta de una gota de agua. Hay que desconectar de vez en cuando, pero utilizando siempre el sentido común. Tengo más responsabilidad que una persona normal, pero también debo poseer mi libertad”. Así de franco se muestra C. Ronaldo contra los que le han querido pegar la etiqueta de amante de la noche. Y es que la estrella del M. U. está empezando a saborear el precio de la fama.

En su país natal, nada de lo que hace resulta anónimo. De hecho, en la pasada Copa del Mundo, su relación con una presentadora de la televisión portuguesa, Merche Romero (de origen andorrano), ocupó bastante más espacio en diarios y revistas que la trayectoria de los hombres de Luis Felipe Scolari en Alemania, aunque él confiese que todo este alboroto no le preocupa demasiado. “Vivo de forma tranquila. Por ejemplo, no dejo de ir a un centro comercial porque haya paparazzi. Si no, no podría salir nunca de casa. Me gusta pasar desapercibido, pero sé que ahora eso es imposible”, concluye al respecto.

Directo e irresistible, tanto fuera del terreno de juego como por la banda derecha de los campos ingleses o de los estadios de los mejores equipos de Europa. Así es y así se define Cristiano Messias Ronaldo dos Santos Aveiro. El chico del nombre interminable, el hombre que puede dominar el planeta fútbol en un futuro muy cercano, si es que no lo está haciendo ya durante esta temporada.

De prosperar la operación que tanto anhela Joan Laporta, el Barcelona se asegurará un auténtico fuera de serie para los próximos años. Un nuevo ídolo para el Camp Nou.

1 comentario:

Dammy dijo...

Seguro que este artículo hará vender muchos Don Balón, estoy seguro de que así será, tan seguro como que los de la editorial no se apostarían ni un sólo €uro de los ganados por la venta de la revista en que esto que dicen se vaya a dar...

Un blogsaludo.